Decía Marshall McLuhan, hablando de comunicación, que el medio es el mensaje. Quiere decir McLuhan que el medio, el soporte que utilizamos para comunicar algo, es tan poderoso que influye en nuestra percepción y altera el significado del mensaje. No es lo mismo un mensaje que publicamos en un periódico, que tiene un proceso y una significación, que uno emitido urgentemente por la radio, más apremiante y con un claro significado de urgencia.
Es interesante analizar esta frase porque estamos viendo cómo en marketing y comunicación turística estamos perdiendo en gran medida no ya el control, sino la comprensión del significado de los medios online. Y esto se ve muy bien cuando los analizamos como canales de comercialización y comunicación.

Por primera vez en la historia las empresas van muy por detrás de los clientes en el uso y comprensión de los canales. La potencia de un medio como el online ha descolocado al sector, que ahora que está asentándose en él ve cómo le vuelven a cambiar los parámetros. Pongamos un ejemplo. Los hoteles están empezando a utilizar los medios online como herramienta de promoción de una manera más natural y a ser conscientes de su importancia en sus estrategias de marketing y comunicación. Pero de pronto llega un actor nuevo, una empresa que ofrece alojamiento pero no hotelero, una empresa que opera a nivel internacional con pocas barreras y que utiliza la red no ya para hacer marketing, sino para crear producto. AirBnB pone en contacto a particulares para que hagan negocio, apoyado por el modelo de economía p2p (peer to peer) y saltándose todas las normas de las escuelas de negocio.
Lo que hace AirBnB no es comercializar alojamiento, sino comercializar un modelo de negocio que los hoteleros no han entendido. La potencia de AirBnB está en comprender que el canal no es sólo un canal de venta, también es un canal de relación, de conversación.
Pero los hoteleros siguen sin comprender el problema, siguen yendo a masters de gestión hotelera de lo más tradicional y perdiendo la oportunidad de adecuar sus estrategias a un modelo de cambio constante que exige respuestas distintas. En lugar de ello atacan a AirBnB y claman por su manera de saltarse las normas fiscales. Vale, pero el problema no es AirBnB, el problema no es la empresa, el problema es el canal que permite que aparezca AirBnB y también Wimdu, y Cookflat, y Trip4real, y Knok, y…
El “problema” no es la empresa que quiere competir con nosotros saltándose las reglas tradicionales, el “problema” es que, además de las tradicionales, hay otras reglas que ya se están utilizando, el “problema” es que hay un canal que permite crear modelos de negocio absolutamente novedosos, baratos, con un mercado mundial y a un coste de comercialización bajísimo. Y esa también es nuestra competencia.
¿Cómo respondemos a eso? ¿Cómo respondemos a ese mensaje que el mercado nos está enviando? ¿Haciendo lo mismo? ¿Tratando de evitar que otros hagan cosas distintas? ¿O comprendemos por qué hay clientes que prefieren salirse de los canales habituales y buscar un producto distinto? ¿Qué les ofrecen ellos que no les demos nosotros? ¿Qué ven de valioso en el otro producto? Y créanme, no es sólo el precio.
Juan Sobejano
Innovación, Estrategia, Medios Sociales, Business Model, Design Thinking, Service Design
Muy buen post.
En Uolala también hemos basado nuestro modelo en p2p y creemos que la demanda de este tipo de modelos de empowerment social está obligando a un cambio profundo en los modelos tradicionales, sin duda.
Un fuerte abrazo,
Hola Marta, así es. Un cambio y avance sin parar. Un saludo y gracias por tu comentario!